En los centros e instituciones sanitarias, se deben prevenir los riesgos durante el proceso de recogida y manipulación de material potencialmente contaminado con gérmenes patógenos; y también durante su limpieza, desinfección y esterilización.
Se han detectado cuatro riesgos principales relacionados con estas prácticas:
- Riesgo de exposición a contaminantes químicos.
- Riesgo de exposición a contaminantes biológicos.
- Riesgo de exposición a radiaciones ionizantes (esterilización mediante rayos gamma).
- Riesgo de exposición a radiaciones no ionizantes (rayos ultravioleta y microondas).
No obstante, el uso de determinados aparatos, como la autoclave, también puede entrañar riesgos, cuya prevención veremos en primer lugar.
MEDIDAS PREVENTIVAS en el manejo del AUTOCLAVE
Las medidas preventivas que deben adoptarse son:
- No extraer directamente el material esterilizado.
- La sala donde se sitúa la autoclave debe estar bien ventilada, debido al vapor de agua que este proceso genera.
- Realizar controles de presión periódicamente.
- Las personas que lo utilicen siempre deben llevar guantes para evitar las quemaduras (se trata de vapor a elevadas temperaturas).
A. Riesgo de exposición a contaminantes químicos
En los centros sanitarios existe el riesgo de exposición ante sustancias químicas utilizadas en la limpieza, desinfección y esterilización del material sanitario (formaldehído, ácido peracético, glutaraldehído, lejía, etc.)Devonn
El uso de desinfectantes como el formaldehído puede tener efectos crónicos en el hígado, sensibilización pulmonar, dermatitis, etc; y es potencialmente cancerígeno. El glutaraldehído puede causar un eczema alérgico y afectar al sistema nervioso, es muy tóxico para la piel y las mucosas y puede provocar además problemas de dolores de cabeza, tos u opresión torácica.
Los profesionales, también pueden verse expuestos ante gases esterilizantes como el óxido de etileno y el peróxido de hidrógeno. El óxido de etileno puede producir efectos irritantes sobre los ojos y la piel en casos de exposición aguda. Ambos gases pueden provocar además irritación en las vías respiratorias (disnea y cianosis ), trastornos en el aparato digestivo (náuseas, vómitos y diarreas) y neurológicos (dolores de cabeza y somnolencia).
La lejía es corrosiva; por lo tanto, se debe evitar su contacto con la piel, ojos y mucosas.
Durante la manipulación del material sanitario para su limpieza y desinfección también es recomendable evitar el posible contacto con restos farmacológicos como anestésicos y citostáticos, potencialmente cancerígenos.
MEDIDAS PREVENTIVAS ante el RIESGO DE EXPOSICIÓN a CONTAMINANTES QUÍMICOS
Las medidas preventivas que deben adoptarse son:
- No se deben utilizar soluciones antiguas para la desinfección de material (a menos que esté descrito en las instrucciones del fabricante).
- No mezclar desinfectantes ni añadir detergentes sin conocer sus características. Ciertas mezclas producen sustancias cancerígenas (Ej. formaldehído + ácido clorhídrico).
- Seguir las recomendaciones sobre las medidas de tipo higiénico y de protección establecidas por el fabricante y definidas en los protocolos de las instituciones.
- Utilizar recipientes limpios y secos.
- No almacenar material sucio. Limpiarlo lo antes posible, retirando toda la materia orgánica antes de su desinfección.
- Desechar la solución al finalizar el trabajo. Si es duradera, se debe guardad bien tapada para evitar que se evapore.
- En el proceso de esterilización se recomienda reducir el uso de óxido de etileno a los materiales que no puedan ser esterilizados mediante autoclave.
Revisar periódicamente el equipo de esterilización según los protocolos de mantenimiento y control de las distintas instituciones.
Además, debemos tener en cuenta los siguientes aspectos:
– Los equipos de esterilización deben estar instalados en salas independientes, de forma que se garantice la estanqueidad durante el proceso y la eliminación del gas al finalizar éste.
– Una solución desinfectante mal utilizada puede sostener el desarrollo de microorganismos y difundir una infección.
En general, en todos los centros sanitarios existe un Plan de Gestión de residuos químicos peligrosos con normas y procedimientos a seguir en función del tipo de residuo. Es muy importante que éste se conozca y se lleve a cabo.
B. Riesgo de exposición a contaminantes biológicos
Los riesgos biológicos que pueden darse en centros o instituciones sanitarias son las infecciones producidas por agentes biológicos patógenos. Éstas se pueden producir por vía digestiva, respiratoria, parenteral (inyecciones intravenosas o intramusculares) y por contacto dérmico. La manipulación de material contaminado es una situación de riesgo.
Las causas de exposición a contaminantes biológicos pueden ser, entre otras, la falta de orden y limpieza, no respetar los procedimientos de trabajo ni las medidas de tipo higiénicas o de seguridad, mala gestión de residuos, etc.
Las consecuencias de la exposición a agentes biológicos son las enfermedades infecciosas que pueden ser oculares, cutáneas o dérmicas, parasitarias, etc.
MEDIDAS PREVENTIVAS ante el RIESGO DE EXPOSICIÓN a CONTAMINANTES BIOLÓGICOS
Las medidas preventivas a tener en cuenta son:
– Las superficies y los equipos se descontaminarán por lo menos una vez al día y cuando haya derrames.
– El protocolo existente en cada centro especificará el modo de empleo de desinfectantes, su naturaleza y concentración.
– Se deben seguir las siguientes normas básicas para evitar riesgos:
. Cubrir heridas y lesiones con apósitos impermeables.
. No comer, beber, ni guardar alimentos en zonas donde haya exposición a agentes biológicos (laboratorio, sala de cura, sala de esterilización, etc.)
. Es necesario que el profesional se lave las manos tras cada contacto con fluidos, muestras o material contaminado; también, tras haber utilizado guantes.
. Utilizar la ropa adecuada con las medidas de seguridad necesarias (gafas, gorros, delantales, etc.) en cada situación.
. No tocar con los guantes ya utilizados ojos, nariz, mucosas o piel.
Además, …
Todos los residuos biológicos potencialmente infecciosos deben ser tratados antes de su eliminación.
El tratamiento de residuos biológicos se realizará de acuerdo con la normativa vigente y los protocolos marcados por el centro.
Todos los centros sanitarios deben tener procedimientos de trabajo y medidas técnicas que eviten o minimicen la liberación de agentes biológicos y reduzcan el número de personas expuestas a los mismos.
C. Riesgo de exposición a radiaciones ionizantes (esterilización mediante rayos gamma).
El riesgo de exposición a radiaciones ionizantes depende del tiempo de exposición o contacto, la distancia entre la fuente de radiación y la persona o la materia interpuesta entre ambos (puertas, paredes, etc.) Puede darse en diferentes zonas del centro: áreas de radiodiagnóstico, áreas de residuos radiactivos, salas de esterilización por rayos gamma, etc.
Sus efectos dependerán de la dosis recibida y el tiempo. Por encima de los valores establecidos de irradiación pueden aparecer reacciones agudas como dermatitis; alteraciones digestivas o neurológicas; o a largo plazo, alteraciones genéticas o cromosómicas.
MEDIDAS PREVENTIVAS ante el RIESGO DE EXPOSICIÓN a RADIACIONES IONIZANTES
Las medidas preventivas que debemos llevar a cabo son:
– Las medidas de radio protección se basan en reducir al mínimo las dosis que puedan recibir las personas.
– Se realizarán mediciones ambientales y control de dosímetro individual en función del tipo de radiación y clasificación de la zona, siempre siguiendo el protocolo de la institución.
– La gestión de residuos radiactivos se realizará siguiendo la normativa vigente y los procedimientos establecidos en el centro.
– Como prevención del riesgo de contaminación, las técnicas más eficaces son el confinamiento en las zonas delimitadas, la limpieza de las instalaciones y la limpieza personal que consisten en:
. No introducir en las zonas activas ni prendas de ropa ajena al trabajo, ni bebida, ni comida.
. Ducharse al final de la jornada laboral y lavarse bien las manos antes de comer, beber o fumar.
. Utilizar la vestimenta y medidas de seguridad adecuadas según cada situación.
– Las instalaciones deben estar dotadas del material necesario que garantice la seguridad de las personas, como guantes, recipientes para residuos radiactivos y detectores de radiación.
MEDIDAS PREVENTIVAS ante el RIESGO DE EXPOSICIÓN a RADIACIONES NO IONIZANTES
Las medidas preventivas a tener en cuenta son:
- Separar y aislar los recintos donde se encuentran los equipos emisores de radiaciones no ionizantes.
- Reducir al mínimo el tiempo de exposición en estos recintos.
- Realizar periódicamente controles y mediciones de los niveles de radiación para detectar fugas.
- Llevar a cabo un mantenimiento adecuado de las instalaciones y equipos, según la legalidad vigente y el protocolo del centro.
- Las lámparas germicidas (de rayos ultravioleta) deben disponer de cristales o pantallas que absorban la mayor parte de la radiación. Nunca se deben eliminar dichos sistemas de protección.
- Cuando sea necesario, se debe utilizar ropa protectora y protección ocular adecuada a la longitud de onda.
D. Riesgo de exposición a radiaciones no ionizantes (rayos ultravioleta y microondas).
Este riesgo se produce por el uso de equipos electromédicos que generan diversos tipos de radiaciones no ionizantes: rayos ultravioleta, microondas, ultrasonidos y campos electromagnéticos.
Los campos magnéticos, radiofrecuencias y microondas pueden producir aumento de temperatura de los tejidos, principalmente en aquellos de menor riego sanguíneo y, por tanto, de menor capacidad de disipación del calor (ojos y testículos), pudiendo dar lugar a lesiones locales (quemaduras, hemorragias y necrosis).
La radiación ultravioleta puede producir eritema o enrojecimiento de la piel, quemaduras, aumento de riesgo de sufrir cáncer de piel y problemas oculares (cataratas, conjuntivitis, fotofobia y lagrimeo).
Como profesionales debemos tener en cuenta…
El seguimiento de todas las medidas preventivas expuestas, tanto para el manejo de instrumentos y productos como para el desarrollo de procesos y la permanencia en el centro, especialmente en zonas potencialmente contaminadas, tiene un carácter totalmente obligatorio.
El no respeto a estas medidas puede tener CONSECUENCIAS MUY GRAVES para las personas expuestas a los riesgos mencionados.